La neuritis óptica inflamatoria es la causa más frecuente de pérdida visual aguda en adultos jóvenes. También conocida como neuritis retrobulbar, se trata de una de las enfermedades más comunes que afectan al nervio responsable de transmitir la información visual desde el ojo hasta el cerebro.
Si bien la neuritis óptica tiene sus síntomas, su propia aparición puede ser el síntoma principal de la esclerosis múltiple. En la Clínica González Costea contamos con equipos de última generación para diagnosticar con total eficiencia los síntomas de esta enfermedad.
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Síntomas de una neuritis óptica
Los síntomas más comunes de la neuritis optica son:
- Dolor ocular: se manifiesta como un dolor continuo pero leve detrás del globo ocular, que se desencadena o empeora con los movimientos oculares.
- Pérdida de la visión: el síntoma principal de la neuritis óptica es la pérdida de visión, que suele hacerse máxima en 1 a 2 días y varía desde un pequeño escotoma central o paracentral hasta una ceguera completa.
- Reducción del campo visual: la pérdida de visión también puede manifestarse como una reducción de la visión periférica.
- Pérdida de la percepción del color: este síntoma se manifiesta como una pérdida de la percepción cromática, que hace que los colores se perciban con menor intensidad de lo habitual, especialmente para el color rojo
Causas de la neuritis óptica
En la mayoría de los casos, la neuritis óptica se produce sin causas aparentes (neuritis idiopática). No obstante, existen carios factores relacionados con su aparición.
- Enfermedades desmielinizantes: estas patologías producen una pérdida de mielina en las fibras nerviosas, lo cual afecta la conducción nerviosa. La enfermedad más conocida de este tipo es la esclerosis múltiple (EM), la cual incide también en la inflamación del nervio óptico.
- Enfermedades autoinmunes: es el caso de la llamada neuritis retrobulbar autoinmunitaria, producida por enfermedades como la sarcoidosis, el lupus eritematoso o el síndrome de Behcet.
- Infección por bacterias o virus: ocurre cuando el nervio óptico se ve afectado directamente por un virus, como en el caso de la sífilis o el SIDA.
También hay casos en los que la inflamación del nervio es producida por enfermedades como rubeola o varicela.
Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico de la neuritis óptica es fundamentalmente clínico. En la exploración oftalmológica existirá un defecto pupilar aferente relativo en el ojo afecto, una agudeza visual disminuida y un escotoma central en el estudio campimétrico.
Son enfermedades que no se pueden prevenir, pero consultar con oftalmólogos y neurólogos especializados en estas patologías puede ayudar a conocer mejor el riesgo particular de cada paciente y por tanto poder asesorar sobre la terapia más adecuada en cada momento. El pronóstico de neuritis óptica suele ser bueno, aunque en algunos casos permanecen pequeñas alteraciones visuales.
Desde la Clínica González Costea, la recomendación es que te realices una revisión oftalmológica al año como mínimo. Puedes pedir una consulta con nuestro equipo completando el formulario de nuestra web.
Llevaremos a cabo un estudio especializado y exhaustivo de tu caso y buscaremos ofrecerte la solución ideal para el bienestar de tus ojos.