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[icon name=»arrow-right» style=»» color=»accent1″ size=»16″ ] Este año la vuelta de las vacaciones es bastante especial dada la situación actual. Poco a poco nos vamos incorporando al trabajo o al teletrabajo tras algunas semanas de descanso. Desde el punto de vista oftalmológico nos enfrentamos a un próximo cambio de estación, en el que vuelven las alergias a afectar a la estabilidad de las membranas oculares y debemos estar preparados para combatirlas.
Nuestros ojos se han visto afectados por semanas o meses de una gran sobre exposición a la radiación ultravioleta en piscinas o playa. Han pasado por el cloro, el agua salada del mar, las altas temperaturas y el abuso de aparatos de aire acondicionado que nos han irritado los ojos.
En algunos casos necesitaremos si fuera necesario, usar durante algunos días, lágrimas artificiales para que nuestros ojos se hidraten hasta que volvamos a la normalidad de la ciudad.
Debemos volver a la senda de la una correcta alimentación, necesario para tener una buena salud ocular, no pueden faltar en nuestra dieta las vitaminas A,B,C y D que nos ayudarán a cuidar de nuestros ojos.
Y si sigues usando lentillas, lo idóneo es empezar mes cambiando lentes de contacto y estuche. En verano es fácil relajarse en su cuidado, limpieza y esterilización. Las lentillas y su estuche requieren unos cuidados de higiene muy extremos para que no se produzca un riego de infección, especialmente si has tenido la ocurrencia de bañarte en mar o piscina con las lentillas puestas.
Volvemos a la rutina y en esta ocasión, más que nunca por la situación en la que vivimos, al uso y abuso de monitores, móviles, tablets… muchas veces en espacios cerrados, sin iluminación natural y todavía bajo potentes aparatos de aire acondicionado.
Si los excesos de este verano han pasado factura a tus ojos, lo más importante es que acudas a nuestra clínica oftalmológica en Murcia para una revisión.
Síntomas más evidentes
Existen diferentes síntomas que nos pueden llevar a acelerar esta revisión. Ante cualquier de ellos lo más inteligente es pedir cita lo antes posible.
Por ejemplo, si tienes la sensación continuada de tener el ojo seco. Posiblemente sea por la exposición al sol, el cloro o el agua salada continuada que puedes haber causado un desequilibrio en el lagrimal y necesitemos recurrir a lágrimas artificiales durante algún tiempo.
Si tienes la visión borrosa de forma permanente, quizás por utilizar gafas de sol sin la correcta protección UV u otras situaciones parecidas pueden haber producido una lesión ocular que deberá revisar un oftalmólogo.
Al igual que si notas cualquier pérdida de visión, debes venir urgentemente al oftalmólogo. Especialmente los pacientes con glaucoma u otras patologías oculares ya que en verano podemos descuidar nuestros tratamientos obviando el peligro que esto supone para la salud ocular.
Si te duelen los ojos, enrojecidos o sientes algún tipo de picazón, generalmente no es grave, pero la picazón en los ojos, el aumento de la producción lagrimal y la fotofobia son síntomas típicos de una conjuntivitis. Y recordemos que en verano son muy comunes este tipo de afecciones de origen vírico o bacteriano debido al ritmo de vida o la visita a piscinas comunitarias.
Exceso de uso de monitores, sus problemas
Por desgracia se esperan meses de uso intensivo de pantallas y monitores, aumentamos el número de horas frente a los dispositivos digitales y más aún si se implementa el teletrabajo. La fatiga ocular, el escozor, el picor o el enrojecimiento son algunos de los síntomas que se vinculan con un exceso de uso de monitores, tablets o móviles, lo que puede conllevar que aparezcan o se agraven diferentes trastornos asociados a la actividad en visión próxima, como estrabismos o miopía.
Si teletrabajamos deberemos implantarnos horarios restringidos, si es posible, con periodos de actividad de 30 minutos seguidos de descansos de 5 a 10 minutos.
También es importante mantener durante las horas de teletrabajo una correcta hidratación ocular mediante el uso de colirios de lágrima artificial si hiciera falta y evitar la tendencia de acercar demasiado la vista a las pantallas.
Y cuando sea posible, realizar actividades al aire libre y en espacio abiertos, con todas las medidas de seguridad marcadas en ese momento.